Jesús Martínez López, propietario y encargado de los Campos Don Jesús, concedió una entrevista para el Departamento de Prensa de la Liga Burócrata Bancaria. El queretano desnudó el cómo las restricciones de actividades por parte de las autoridades en este nuevo escenario han impactado a su negocio e ingresos.
“El famoso Escenario B es el que nos está limitando. Si ingresaban $100 anuales, ahora ingresan $5. Los colaboradores directos dependemos 100% de la renta de los campos”, mencionó el responsable de los empastados ubicados en la entrada a San Pedro Mártir al especificar que más allá de tener congelado el espacio, también se afecta a colaboradores indirectos como lo es el arbitraje, la venta de comida y la venta de artículos deportivos.
Aperturados en 2005, los Campos Don Jesús se han ganado el reconocimiento dentro del fútbol amateur en el estado por albergar diversas competiciones, tanto varoniles como femeniles, en divisiones menores, libres y mayores. Sin embargo, el peligro de visualizar una fecha de caducidad es cada vez mayor a raíz de la incertidumbre que provocan las normativas en vigor.
El polémico Escenario B, aquel que permite e incentiva a la vida nocturna, donde el contacto físico es ciego y la circulación aerobia es pulcra, pero cataloga al deporte como un delito, sigue evidenciando un contraste innegable, e incongruente, en la actualidad social en Querétaro.
“Es un tema sensible y se me hace muy restrictivo. Las autoridades dicen promover, proteger, respetar y garantizar los Derechos Humanos, pero a nosotros no nos están considerando y nos están negando el derecho al trabajo. Así como yo, todos mis colegas propietarios de campos y propietarios de ligas tenemos que alzar la voz”, enfatizó sobre estos matices.
Sobre una solución en conjunto, Don Jesús lo tiene claro: Hace falta un diálogo. Un diálogo que, por parte de ligas y campos, se ha intentado de manera presencial y formal a través de cartas que no han prosperado; a estas “respuestas”, expresó responsabilizar directamente a los encargados de la Brigada Anti-Covid en Sector Salud.
“No hemos sido escuchados, somos personas y como tal debemos ser tratadas. Si se requiere un protocolo en instalaciones, se ha propuesto y con gusto lo hacemos, pero falta el diálogo por parte de las autoridades encargadas. Ya no podemos decir a la familia que no hay ingresos”, finalizó Martínez López.
